Estas cárceles llamadas APAC, que quiere decir, Asociación y Asistencia a los Condenados, están ubicadas en Brasil. Existen 28 en total y son atendidas por voluntarios de la sociedad civil. La religión opera como método de control social, éstas son unidades pequeñas y selectivas. Para estar acá hay algunos requisitos, el de estar condenado y no procesado, el de levantarse a las seis de la mañana para estudiar o trabajar sí o sí, y también tiene obligaciones católicas impuestas, que consisten en cuatro oraciones diarias, oraciones pegadas en las paredes. Y además estas cárceles deben encontrarse cerca de donde vive la familia, para que los presos reciban visitas de forma continua por parte de sus allegados.Si se hace una comparación entre los dos sistemas, el de las APAC y las cárceles comunes, hay una gran diferencia. Mientras que en una los presos comen en el piso, hacinados, en el medio de la violencia; en la otra, los presos son llamados por sus nombres, hay cinco personas por celda, comen comida saludable con cubiertos en comedores, tienen que ir a trabajar y a estudiar, donde no es permitida la violencia física, donde no hay drogas. Todo esto es mucho mejor, tanto para los presos como para las familias.
Las revisiones de las familias no son violentas; no las maltratan.
Para mi en este tipo de cárceles, hay muchas más ventajas; son más humanas. Me parece un buen proyecto, es muy parecido a las casas en las que vivimos nosotros, lo cual se llama casas por cárceles, en donde obtenemos una semi libertad en faz de la confianza.
1 comentario:
deberian poner ese tipo de carceles aca para los jovenes que piensan que esta todo perdido por eso salen a delinquir una y mil veces porque seguro lo eligieron por falta de oportunidades no los disculpo ,poero tampoco los condeno creo que si quieren pueden cambiar pero y que se hace para ayudarlos..?
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